No lo pude evitar, fui al vivero a comprar rosales y me encontré con unas tomateras "tipo raf" crecidísimas y en plena producción y me traje una a casa. Aunque le ha costado unas tres semanas superar el trasplante me parece que este año SÍ que comeré tomates, no como el pasado. De hecho ya he comido. Hasta ahora no son muy sabrosos pero supongo que es porque todavía no hace calor.
Por otra parte, al ver lo grande que es la tomatera cuando ya está crecidita, me he dado cuenta de que el año pasado puse demasiadas plantas en cada jardinera. Este año me controlaré más cuando compre los planteros.
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Us envio l'enllaç a un projecte per unir-nos els blocaires d'horts urbans:
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Gracias Molsa, me parece una idea estupenda, ¡me apunto!
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